El mar que nos une es una exhibición integrada por dos muestras que indagan los profundos vínculos que existen entre Argentina e Italia.

La propuesta está conformada por la muestra Amerigo Vespucci. La nave più bella del mondo, que expone imágenes de la icónica embarcación tomadas por los fotógrafos italianos Maki Galimberti y Massimo Sestini; y Mis raíces están aquí, una experiencia inmersiva centrada en la inmigración y el deporte.

Amerigo Vespucci. La nave più bella del mondo es una iniciativa del Instituto Italiano de Cultura de Buenos Aires con 40 fotografías de los reconocidos fotógrafos Maki Galimberti y Massimo Sestini, quienes durante dos años compartieron la vida a bordo junto a los tripulantes de la nave.

El Buque Escuela Amerigo Vespucci, que es la unidad más antigua en servicio de la Marina Militar Italiana, echó amarras en el puerto de la ciudad de Buenos Aires el 19 de marzo pasado, como parte de su gira mundial 2023-2025, y permaneció hasta el 21 de marzo.

Esta embarcación -llamada así en honor al célebre navegante por quien nuestro continente fue bautizado América- es considerada una obra maestra de la excelencia náutica italiana y se ganó el título de “nave más bella del mundo” en 1962 en el mar Mediterráneo cuando el comandante de un portaaviones norteamericano que había solicitado su identificación expresó: “Eres la nave más hermosa del mundo”.

La exhibición Mis raíces están aquí, realizada y promovida por el Consulado General de Italia en Buenos Aires y en colaboración con el Museo Nacional de la Emigración Italiana, propone una experiencia inmersiva sobre la emigración italiana, centrada en uno de los aspectos más conocidos y significativos en Argentina: el deporte.

A través de una puesta inédita de material de archivo, un videomapping proyecta las historias de deportistas y clubes, desde finales del siglo XIX hasta hoy. También se exhibe un documental sobre la gira del equipo de fútbol del Genoa por América del Sur, que tuvo lugar hace poco más de un siglo tras la victoria del scudetto (campeonato) en Italia.

Para Livia Raponi, directora general del Instituto Italiano de Cultura en Buenos Aires, las dos exposiciones muestran diferentes encarnaciones del talento y del amor por la belleza que caracteriza a los italianos.

Por su parte, el fotógrafo retratista Maki Galimberti, presente en la inauguración de la muestra, expresó: “Estoy muy orgulloso de esta exposición que ahora llega a Buenos Aires después de Río de Janeiro y después de Livorno, en Italia, porque es un trabajo que exalta un símbolo de la italianidad. Y, en lo que respecta a mi historia como fotógrafo, destaca una gran historia de amistad entre Massimo Sestini y yo, porque es un trabajo compartido. Nos ocupamos de dos aspectos diferentes: yo me dediqué a los retratos de los rostros del equipo de la nave, y Massimo, por otro lado, fotografió de manera extraordinaria la nave misma desde cada punto de vista imaginable. Esto completa el trabajo y es un viaje único, tanto de cerca como de lejos, que me alegra que haya llegado aquí a Buenos Aires”.

La exhibición puede visitarse hasta el 28 de abril, en las salas 606 y 607 del CCK, de miércoles a domingos, de 14 a 20 h. No se requiere reserva de entradas.